sábado, 28 de agosto de 2010

A tus palabras

"De mi barco, soy la capitana y tu
mi tripulánte."

¿Donde llegaremos? Quiero conocer el horizonte. Hundirme junto con el sol allá, al final de la tierra, donde el cielo se junta con el mar, enlazados por el blanco tímido de la luna. Llevame a ese lugar, si lo conoces.
No te pido grandes esfuerzos para mantenerme tranquilo. No me atemoriza el morir en el intento. Estoy a punto de embarcarme rumbo a lo desconocido, pero sin embargo, deseo con locura aventurarme hacia ese destino, el horizonte...
Es casi una fascinación. Casi una fantasía.
¿Puedes cumplirla? Tengo fé en ti. Ayudame a llegar a ese lugar. Donde lo desconocido ya no existe y lo imposible es imposible.

2 comentarios:

  1. Donde lo desconocido ya no existe y lo imposible es imposible... Sin dudar te equivocas, hasta lo mas imposible es posible, y los descoocido se sabe. Fuerzas para embarcar la nave en el mar!

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  2. Y pensar que nunca nadie ha llegado al horizonte... no porque esté muy lejos, sino porque se mueve.

    Sin embargo, podemos soñar que caminamos por la línea del horizonte haciendo equilibrio... y que no caeremos al abismo.

    (Se agradecen, además, las palabras dejadas por allá, en mi casa de alfabetos).

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